Niño de 9 años primer afectado por pólvora en Neiva

Un menor de 9 años de edad, resultó afectado por pólvora en la ciudad de Neiva, el menor presenta posible daño ocular y quemadura en el rostro grado 1, como consecuencia de manipulación de elemento pirotécnico tipo tote. Municipios como Pitalito y Timaná se suman a los primeros casos.

En el marco de la vigilancia de quemaduras por pólvora vigente a nivel nacional, el departamento del Huila notificó el tercer caso, se trata de un menor de 9 años de edad, procedente del municipio de Neiva, quien presenta posible daño ocular y quemadura en el rostro grado 1, como consecuencia de manipulación de elemento pirotécnico tipo tote.

El segundo caso, se presentó en un menor, de 12 años de edad, procedente del municipio de Timaná, quien presenta lesión por manipulación de elemento pirotécnico tipo tronante, evento que sucedió en la vía pública. El menor fue atendido en el Hospital San Antonio de Pitalito.

El primer caso, se presentó en un hombre de 28 años de edad, procedente de la zona rural del municipio de Pitalito, quien presentó laceración en antebrazo izquierdo y región abdominal. El elemento implicado fue un cohete, y se causa la lesión en la vivienda del afectado. El afectado recibió atención médica y se encuentra estable.

En los casos notificados en el departamento del Huila se observa que el 100% de los eventos han ocurrido por manipulación de pólvora, los afectados han resultado con quemaduras de primer grado y en algunas situaciones se han comprometidos órganos como la vista y el oído.

Es importante reconocer que la pólvora pirotécnica puede causar discapacidad y graves lesiones de índole físico y psicológico. Durante la temporada 2022 se registraron heridas de alto impacto como fracturas, amputaciones y daño auditivo. Evitemos a los niños, niñas y adolescentes la exposición a la pólvora.

El Ministerio de Salud y Protección Social en alianza con el Instituto Nacional de Salud (INS) impulsan la campaña ‘Celebremos distinto #EstáEnTusManos’, una iniciativa que busca reducir el riesgo de lesiones por el uso de pólvora, así como prevenir intoxicaciones por consumo accidental de fósforo blanco y alcohol adulterado durante las festividades de Navidad y Año Nuevo.